El Goldendoodle combina dos de las razas más asombrosas, el Caniche y el Golden Retriever, y requieren mucho ejercicio y actividades. La natación siempre es una excelente manera de ejercitar a un perro de raza mediana a grande sin afectar sus articulaciones, pero ¿puede nadar Goldendoodles?
La respuesta es sí, pueden nadar, pero es posible que necesiten un poco de estímulo. Ambas razas progenitoras son perros de agua, por lo que Goldendoodles tiene las habilidades, pero es posible que aún requiera algo de entrenamiento para nadar con seguridad.
¿Puede nadar Goldendoodles?
Dado que los padres del Goldendoodle son perros amantes del agua, tienen las habilidades y el entusiasmo para nadar. El Goldendoodle también tiene pies palmeados y una capa resistente al agua que proporciona flotabilidad y se seca rápidamente. Estas características los convierten en una excelente raza para nadar.
Sin embargo, como todos los perros, algunos pueden disfrutar más o ser más hábiles que otros, por lo que requieren estímulo al principio. La capacitación también es vital para garantizar que su Goldendoodle esté seguro durante las actividades acuáticas. También es útil acostumbrar a su Goldendoodle al agua desde una edad temprana para que esté más familiarizado con el agua y la natación.
¿A Goldendoodles le gusta nadar?
Además de una habilidad natural para nadar, los Goldendoodles generalmente también están entusiasmados con la natación y disfrutan del agua. Desde piscinas hasta lagos e incluso la playa, lo más probable es que a su Goldendoodle le encante el agua. Especialmente cuando los inicias en el agua temprano, no dudarán en nadar contigo porque ha sido parte de su vida desde una edad temprana. Así que cuanto más a menudo lleves tu Goldendoodle a nadar, mejor.
Es importante tener en cuenta que esto también es una generalización, ya que no hay dos perros iguales. Si quieres que tu Goldendoodle sea un ávido nadador, necesitará presentaciones tempranas, entrenamiento y algo de diversión.
Cómo enseñar a nadar a tu goldendoodle
Los Goldendoodles son elogiados por su inteligencia, lo que los hace fáciles de entrenar. Están ansiosos por complacer a sus dueños, lo que hace que las lecciones de natación sean mucho más fáciles para los entrenadores. Usando el refuerzo positivo, tu Goldendoodle no tardará mucho en responder a los comandos básicos y avanzados, y si haces que sea una sesión divertida y optimista, no pasará mucho tiempo hasta que tu Goldendoodle se enamore del agua.
A la hora de enseñar a nadar a tu Goldendoodle, es fundamental que empiece en un entorno pequeño y seguro, en sesiones cortas que vayan creciendo paulatinamente. Un gran lugar para comenzar es una piscina de plástico para niños. Puede arrojar su juguete favorito de Goldendoodles en aguas poco profundas y animar a su perro a que lo recupere con golosinas y elogios. Cada vez que su Goldendoodle entre y salga del agua, recompénselo con una golosina y haga un gran escándalo por lo que acaba de suceder. Si su Goldendoodle es un poco resistente al principio, intente sentarse con él en aguas poco profundas. Hágale saber a su perro que es seguro pararse en el agua estando a su lado todo el tiempo. Esto le dará a tu perro una sensación extra de seguridad y lo animará a pasar más tiempo en el agua.
A medida que su Goldendoodle se sienta más cómodo, puede aumentar el nivel del agua gradualmente hasta que se sienta seguro de s altar y mojarse. Sin embargo, asegúrese de que la piscina tenga una salida, como una escalera, para que su perro pueda salir de manera segura y no se agote por nadar.
1. Natación segura
La seguridad debe ser tu prioridad. En primer lugar, completar un curso de primeros auxilios para mascotas puede ser muy útil, ya que nunca se sabe lo que podría pasar, y estar preparado y bien informado podría salvar la vida de su perro.
2. Supervisa a tu perro
Nunca dejes que tu Goldendoodle nade sin supervisión; incluso el nadador canino más fuerte puede encontrarse con un problema. Considere un chaleco salvavidas si está nervioso o cuando su Goldendoodle todavía está aprendiendo. Un chaleco salvavidas puede salvar la vida de su perro al mantenerlo a flote si se cansa demasiado para seguir remando o si se queda atrapado en una corriente.
3. Limite el tiempo en el agua
Aunque a su Goldendoodle le encanta el agua, nadar es extenuante, pero debido a la flotabilidad del agua, puede ser difícil para su perro darse cuenta de lo cansado que está. No permita que su Goldendoodle nade por mucho tiempo y vigílelo muy de cerca.
Cuando su Goldendoodle esté nadando por primera vez, déjelo nadar solo de 5 a 10 minutos y aumente gradualmente el tiempo a medida que gana más confianza. Siempre tenga en cuenta la edad, el nivel de habilidad y el tamaño de su perro al nadar. Un Goldendoodle más joven puede entrar en pánico o agotarse antes, y un perro mayor puede pensar que es más fuerte y más experimentado de lo que es. Asegúrate de tener siempre agua fresca para que tu perro se rehidrate.
4. Tenga cuidado con la temperatura y las corrientes
Nunca permita que su perro nade en agua en la que no se sentiría cómodo nadando. Por ejemplo, evite nadar si la temperatura del agua o del aire es demasiado fría. Cuando nade en el mar o en lagos y presas, tenga cuidado con las mareas y las corrientes y cualquier obstáculo en el agua, como rocas grandes o troncos grandes que sobresalgan.
5. Enjuague bien a su perro después de nadar
Siempre enjuague su Goldendoodle después de nadar. El cloro, el agua salada y otros contaminantes pueden irritar la piel de tu perro. Además, asegúrese de secar bien sus orejas para evitar infecciones.
Conclusión
Los Goldendoodles son nadadores naturales, pero requieren entrenamiento y estímulo. Sin embargo, no todos los Goldendoodles reaccionarán al agua de la misma manera; algunos pueden estar más aprensivos, mientras que otros no dudarán en absoluto. Si desea que su Goldendoodle sea un nadador, es importante exponerlo lenta y cuidadosamente al agua desde una edad muy temprana.
La seguridad también debe ser su principal preocupación cuando su Goldendoodle está nadando. Tenga en cuenta sus habilidades para nadar, las señales de que está cansado y el entorno en el que está nadando, y no permita que nade por mucho tiempo. Ten siempre agua fresca a mano y asegúrate de que cada sesión de natación sea una experiencia positiva.