A los gatos les encanta acurrucarse en espacios pequeños y cómodos, lejos del ajetreo y el bullicio de la vida diaria. Si tienes un gato, no hay duda de que has encontrado a tu amigo felino acurrucado en una caja, un armario, debajo de la cama o en otro espacio cerrado. ¡Es posible que incluso hayas pasado mucho tiempo buscando frenéticamente a tu gato aparentemente perdido solo para encontrarlo mirándote desde su escondite secreto!
Esconderse es parte del comportamiento normal de un gato. Este comportamiento se deriva del hecho de que los gatos han evolucionado para ser tanto depredadores como presas. Esconderse es una de las tácticas de supervivencia que los gatos utilizan en la naturaleza para ocultarse y protegerse de los depredadores más grandes, como los búhos. Un gato también se esconderá mientras acecha presas como ratones y pájaros pequeños. A pesar de que su gato puede vivir en el interior en un espacio seguro y ya no tiene que cazar para comer, este rasgo de supervivencia ha persistido.
Esconderse puede ser una actividad relajante para un gato, ya que les da una sensación de seguridad y protección. Los gatos, como las personas, tienen personalidades diferentes y algunos gatos se esconden más que otros. Sin embargo, cuando un gato cambia su comportamiento de escondite o comienza a esconderse durante períodos prolongados, puede ser una señal de que algo anda mal. Los gatos comúnmente se esconden debido al estrés o problemas de salud, como enfermedades o dolor. Las gatas preñadas también pueden empezar a esconderse la semana antes de dar a luz.
Las 3 razones por las que los gatos se esconden
1. Estrés
Los gatos son sensibles a los cambios en su entorno. Cuando los gatos se encuentran con alguien o algo desconocido, o cuando se les presenta un nuevo entorno, es normal que se escondan. Un nuevo hogar, invitados desconocidos, nuevos miembros de la familia y nuevos animales pueden percibirse como fuentes de peligro potencial para un gato. Esconderse hace que un gato se sienta a salvo del peligro percibido. No obligues a un gato a salir de su escondite si está estresado, ya que esto puede hacerlo sentir más inseguro y empeorar el problema. La ocultación del estrés suele ser de corta duración y su gato debería resurgir una vez que la fuente de estrés haya desaparecido o cuando se haya adaptado al cambio y se sienta cómodo nuevamente.
La ocultación causada por el estrés es un problema cuando continúa durante largos períodos de tiempo o interfiere con las actividades normales del día a día de un gato, como comer, beber o usar la caja de arena. El estrés experimentado durante largos períodos puede debilitar el sistema inmunológico de un gato y hacer que se enferme. Si tu gato se esconde durante períodos prolongados de tiempo, es recomendable que lo revise un veterinario.
Esconderse puede ir acompañado de otros signos de estrés crónico, como orinar fuera de la caja de arena o acicalarse demasiado. Un gato normalmente relajado puede mostrar signos de agresión cuando está estresado. Asegúrese de mencionar cualquier cambio de comportamiento a su veterinario.
Si su veterinario descarta un problema de salud, puede derivar a su gato a un especialista en comportamiento para una evaluación y asesoramiento.
2. Problemas de salud
En la naturaleza, los animales más débiles son blancos vulnerables y fáciles para los depredadores. Cuando están heridos o enfermos, los gatos salvajes se esconden para protegerse de los depredadores. Este instinto permanece en los gatos incluso cuando se han domesticado.
Los gatos ocultan instintivamente la enfermedad y el dolor, y cualquier problema de salud puede hacer que un gato se esconda. Los problemas gastrointestinales, las enfermedades renales, las enfermedades dentales y las infecciones pueden hacer que un gato se sienta mal o tenga dolor.
Vómitos o diarrea, secreción de los ojos o la nariz, tos, estornudos y f alta de apetito son algunos de los otros signos de que un gato no está bien. Sin embargo, esconderse es con frecuencia el único signo de que un gato está enfermo, por lo que cuando un gato se esconde y su entorno no ha cambiado, debe tomarlo en serio y hacer que un veterinario lo revise.
3. Nacimiento inminente
Una reina embarazada comenzará a buscar un lugar seguro y tranquilo aproximadamente una semana antes de dar a luz. En esta etapa de su embarazo, sus pezones también pueden estar agrandados y puede tener un abdomen colgante. Una gata no esterilizada que comienza a esconderse más de lo normal debe ser revisada por un veterinario.
Si su veterinario sospecha que su gata está embarazada, es posible que desee realizar una ecografía o radiografías para confirmarlo. Si su gata está embarazada, su veterinario podrá aconsejarle sobre la mejor manera de prepararse para el parto.
Crear un escondite seguro para tu gato
Todos los gatos se benefician de tener un espacio seguro en el que esconderse si se sienten amenazados o necesitan algo de tiempo para relajarse.
Los gatos generalmente eligen escondites que son privados y seguros. Tienden a elegir espacios que están totalmente cerrados o parcialmente cerrados con un espacio para mirar. Algunos gatos disfrutan de escondites elevados desde los que pueden observar el mundo. También les gusta esconderse en lugares con olores familiares como un cesto de ropa o encima de la ropa doblada en su armario. Los gatos mayores con artritis pueden preferir un lugar más cercano al suelo, ya que s altar puede ser demasiado doloroso para ellos.
Asegúrese de que haya suficientes escondites disponibles para todos los gatos de su hogar para que no tengan que competir por los recursos. Los armarios abiertos, el espacio debajo de una cama o detrás de un sofá, cajas o capullos de gato son buenas opciones para esconderse. Puede hacer que las áreas de escondite existentes sean más atractivas para su gato colocando una manta suave para que se acueste. Sin embargo, los gatos generalmente encontrarán su propio escondite sin tu ayuda. A veces, un gato puede elegir un escondite que es peligroso. Se sabe que los gatos se acurrucan en las secadoras y en el motor caliente de un automóvil. Es importante bloquear el acceso a estas áreas potencialmente peligrosas.
Reflexiones finales
Esconderse es un comportamiento normal en los gatos. La clave es saber qué es normal para tu gato en particular. Si tu gato comienza a esconderse más de lo normal, puede ser una señal de que hay un problema y es mejor que lo revise un veterinario.