Los gatos tienen algunos comportamientos peculiares, como lamerse a sí mismos, a ti o al aire cuando los rascan o los acarician. Hay muchas razones posibles para esto, que van desde disfrutar la sensación hasta sentirse incómodo.
Estas son las cuatro razones por las que tu gato puede lamer cuando lo acaricias o le rascas el lomo.
Las 4 razones por las que los gatos lamen cuando les rascas la espalda
1. Estás rascando un buen lugar
Si está frotando o rascando suavemente a su gato y golpea un lugar que le pica, el gato no puede conseguirlo por sí mismo, puede hacer que su gato lama el aire u otra parte de su cuerpo. Es probable que esto se deba a que su gato no puede llegar a ese lugar para "ayudar" y es una respuesta automática a la sensación.
2. Su gato puede tener una enfermedad de la piel
Si su gato tiene pulgas, ácaros o irritación de la piel por alergias o un irritante ambiental, las caricias pueden crear una sensación incómoda. Lamer puede ser una respuesta a una sensación incómoda o molesta. Tenga cuidado, ya que esto puede progresar hasta morderse o rascarse a sí mismo o a usted como respuesta.
3. Tu gato quiere que te detengas
Del mismo modo, es posible que tu gato esté lamiendo porque no quiere que lo acaricies o lo rasques, incluso si su piel no tiene nada de malo. Algunos gatos sufren del síndrome de hiperestesia felina, que puede hacer que su piel sea muy sensible. Si este es el caso, incluso un rasguño suave puede ser extremadamente incómodo y hacer que tu gato se enfurezca.
4. Su gato puede estar participando en el acicalamiento mutuo (allogrooming)
El aseo personal es una parte importante de la comunicación y las relaciones entre gatos. Podría ser para demostrar el vínculo, para ayudar a otros gatos a acicalar áreas difíciles, como instinto maternal o para redirigir la agresión. Cuando está acariciando o arañando a su gato, podría desencadenar un deseo de acicalamiento mutuo.
¿Es saludable que un gato lama mientras lo arañan o lo acarician?
Dependiendo de la razón por la que tu gato lame, el comportamiento puede ser una indicación perfectamente saludable de tu vínculo y amor. Pero en algunos casos, podría indicar una posible condición de salud o una situación estresante a la que debes prestar atención.
La clave está en el resto del lenguaje corporal de tu gato. Si su gato se mantiene relajado mientras lame o muestra otros signos de placer, como ronronear o "mordidas de amor" suaves, es probable que lamer sea una señal de placer.
Sin embargo, si su gato parece tenso y responde lamiendo, arañando o mordiendo de manera obsesiva, podría ser porque el lugar que está acariciando es incómodo o porque su gato sufre de una condición de salud. Tome nota si el comportamiento ocurre en general o solo cuando golpea un punto determinado, lo que podría darle una pista de lo que podría estar mal. Si sospechas de un problema de salud, es importante que hagas una cita con tu veterinario.
Los gatos a menudo tienen claros sus límites y te hacen saber rápidamente que no les gusta lo que estás haciendo. Si notas que tu gato se resiste a las caricias y reacciona con fuerza cada vez que lo intentas, ¡no lo fuerces! Solo dañarás la relación y harás que sea más difícil darle afecto a tu gato en el futuro.
Respeta los límites de tu gato, y es posible que descubras que estará más dispuesto y cómodo viniendo a ti para buscar atención en el futuro.
Conclusión
Los gatos pueden lamer en respuesta a un rasguño o una caricia por muchas razones diferentes. En muchos casos, es un aseo mutuo instintivo o una expresión de placer, pero otras veces, puede ser una señal de que estás incomodando a tu gato. Presta atención al comportamiento de tu gato y siempre llama a tu veterinario si sospechas que algo anda mal.