Las vacunas contra la rabia son importantes para los perros porque la enfermedad es casi indetectable hasta que es demasiado tarde y un perro también puede transmitir la enfermedad a otros animales y personas. Desafortunadamente, la rabia casi siempre es mortal y la enfermedad no se puede tratar1Por lo tanto, existen leyes en los Estados Unidos que exigen la vacunación de los perros contra la rabia. Hawái libre de rabia requiere vacunas contra la rabia y prueba de pruebas de rabia negativas (e incluso un tipo de cuarentena2) antes de que se permita la entrada de cualquier perro al estado.
Si bien la mayoría de los estados solo exigen la vacuna, las leyes de vacunación contra la rabia varían de un estado a otro y de un condado a otro. Sin embargo, hay un par de políticas que parecen haber sido adoptadas en todos los ámbitos, cuando se trata de una vacunación inicial y una segunda. Esto es lo que debe saber sobre la frecuencia con la que un perro debe vacunarse contra la rabia.
La primera y segunda vacuna antirrábica
La mayoría de los veterinarios les dan a los cachorros su primera vacuna contra la rabia alrededor de las 16 semanas de edad, pero nunca antes de los 3 meses de edad. La segunda vacunación generalmente se administra 1 año después. Esto proporciona una protección inicial para los cachorros a medida que crecen y entran en su etapa más activa de exploración de ambientes exteriores, donde es más probable que se infecten con la rabia.
Su veterinario debe programar la administración de la segunda vacuna cuando se presente para recibir la primera vacuna. Si obtiene su perro después de haber recibido su primera vacuna contra la rabia, es importante obtener la documentación de la vacuna para que pueda determinar cuándo programar la próxima vacuna. Hay diferentes reglas en cada estado con respecto a las vacunas contra la rabia. Entonces, si no está seguro según los datos proporcionados, su veterinario puede ayudarlo a determinar qué se debe hacer y cuándo.
Vacunas de refuerzo a lo largo de la vida de un perro
La primera y la segunda vacuna no son las únicas que tu perro recibirá a lo largo de su vida para mantenerse protegido contra la rabia. Según el tipo de vacuna utilizada y las leyes de su área, es posible que su perro deba vacunarse contra la rabia cada 1 a 3 años después de las dosis iniciales. La protección que brindan las vacunas no dura toda la vida. Se debe recordar al sistema inmunitario de un perro cómo combatir el virus de la rabia a intervalos regulares para garantizar una protección de por vida, razón por la cual se requieren vacunas periódicas.
La importancia de las vacunas antirrábicas para perros
Desafortunadamente, la rabia es mortal y no se puede detectar hasta que los signos clínicos ya han comenzado a manifestarse, momento en el que ya es demasiado tarde para el tratamiento. También es extremadamente transmisible. Todo lo que se necesita es una mordedura de un animal infectado, y el perro o la persona mordida pueden infectarse. Por ello, es fundamental que te asegures de seguir el calendario de vacunación de tu perro, no solo por su salud sino por la tuya.
Posibles efectos secundarios de la vacuna antirrábica para perros
Es importante entender que los efectos secundarios pueden ocurrir después de que su perro reciba la vacuna contra la rabia. La mayoría son leves y no hay nada de qué preocuparse, pero algunos pueden ser perjudiciales. Estos son los signos de efectos secundarios que debe buscar.
Síntomas temporales leves:
- Letargo
- Pérdida de apetito
- Inflamación leve en el lugar de la inyección
Síntomas graves que requieren atención veterinaria inmediata:
- Urticaria
- Problemas respiratorios
- Paro cardíaco
Si no está seguro de los síntomas que muestra su perro o si está seguro de que presenta síntomas graves, es importante que visite a su veterinario o a un centro veterinario de emergencia de inmediato. Siempre es una buena idea quedarse en la oficina del veterinario durante aproximadamente una hora después de la vacuna contra la rabia, si es posible, en caso de que se presenten efectos secundarios graves.
Reflexiones finales
Hay muchas razones para asegurarse de que nuestro perro reciba sus vacunas contra la rabia, una de las más importantes son las implicaciones para la salud pública. También es legalmente requerido en la mayoría de los casos. Existe la posibilidad de una reacción a la vacuna, pero en la mayoría de los casos las vacunas son bien toleradas. Los efectos secundarios se pueden tratar según sea necesario. Trabaje con un veterinario para determinar cuándo y con qué frecuencia su perro debe recibir las vacunas contra la rabia.