La capacidad de un perro para consumir lácteos dependerá de su tolerancia a la lactosa. Si bien los lácteos no contienen ningún elemento que sea tóxico para los perros, los perros aún pueden tener malestar estomacal si no pueden procesar la lactosa.
Por lo tanto, es seguro que algunos perros coman productos lácteos, como leche, queso y yogur. Sin embargo, estos alimentos deben administrarse con moderación. Los perros que constantemente tienen malestar estomacal por comer productos lácteos deben abstenerse de comerlos, incluso si los disfrutan.
Perros y lácteos
A pesar de ser un regalo popular para los perros, muchos perros en realidad son intolerantes a los lácteos.1Descubrirá que la mayoría de los perros no pueden beber grandes cantidades de leche de vaca debido al contenido de lactosa. Sin embargo, pueden disfrutar de pequeñas porciones de queso y yogur porque son más fáciles de digerir.
Por lo tanto, no se recomienda darles a los perros leche, crema batida o helado porque tienen un mayor contenido de lactosa.2La mayoría de los perros pueden disfrutar de pequeños trozos de queso con concentraciones más bajas de lactosa Los perros pueden comer quesos duros, como cheddar, parmesano y queso suizo, porque contienen menos lactosa.
Signos de intolerancia a la lactosa en perros
Algunos perros experimentan molestias gastrointestinales cuando comen productos lácteos. Si su perro presenta alguno de los siguientes signos de intolerancia a la lactosa, asegúrese de dejar de alimentarlo con productos lácteos:
- Hinchazón
- Gasos
- Diarrea
- Dolor abdominal
¿Tienen los lácteos beneficios para la salud de los perros?
Los productos lácteos tienen algunos beneficios considerables para la salud. La leche es una excelente fuente de calcio y vitamina D. Los productos lácteos bajos en grasa también pueden reducir el riesgo de enfermedades del corazón.
Algunos productos lácteos, como el yogur griego, pueden reducir el riesgo de obesidad y diabetes tipo 2. Los perros que no son intolerantes a la lactosa pueden beneficiarse de comer yogur natural después de experimentar malestar estomacal debido a su alto contenido de probióticos.
Si bien los lácteos tienen beneficios para la salud, muchos otros alimentos pueden brindar los mismos nutrientes a los perros sin el riesgo de problemas digestivos. La mayoría de los productos lácteos también tienen un alto contenido de grasa, y la leche y la nata contienen mucha azúcar. Por lo tanto, deben administrarse con moderación para evitar el aumento excesivo de peso y la obesidad.
También es importante evitar alimentar a su perro con productos lácteos con edulcorantes artificiales, particularmente con xilitol. El xilitol es muy tóxico para los perros y puede provocar hipoglucemia e insuficiencia hepática.
Cómo alimentar a los perros con productos lácteos de forma segura
Muchos perros pueden disfrutar comiendo quesos duros y yogur natural como golosinas ocasionales. Solo asegúrate de darles una pequeña cantidad al principio, controla su estado y busca cualquier signo de intolerancia a la lactosa.
Si a tu perro realmente le gusta comer queso, trata de alimentarlo con golosinas para perros que contengan queso. Estos quesos son más aptos para perros y las golosinas combinan otros ingredientes que son fáciles de digerir para los perros. Por lo tanto, su perro aún puede disfrutar del sabor sin consumir tantos lácteos.
Absténgase de alimentar a su perro con leche, helado y crema batida. Su alto contenido de lactosa y azúcar los hace innecesarios en la dieta de un perro y pueden contribuir a complicaciones de salud.
Los perros con sobrepeso u obesos no deben recibir productos lácteos, ya que introducir más grasas en su dieta dificultará aún más la pérdida de peso.
Conclusión
En general, la capacidad de tu perro para comer lácteos dependerá de su tolerancia a la lactosa. Sin embargo, los productos lácteos no son los alimentos más saludables para los perros, así que solo dáselos como golosinas especiales que su perro pueda comer de vez en cuando. Los lácteos no tienen cabida como parte principal de la dieta de un perro.
Afortunadamente, hay muchos otros snacks que los perros pueden comer sin peligro. Por lo tanto, asegúrese de sopesar los beneficios y riesgos de los productos lácteos antes de dárselos a su perro. Por último, absténgase de darle productos lácteos continuamente a su perro si muestra algún síntoma de malestar gastrointestinal o intolerancia a la lactosa.