Muchos gatos se portan bien con las personas embarazadas, en particular con aquellas a las que consideran parte de su familia. Pero de vez en cuando, algunos se vuelven agresivos con los que esperan. Las gatas están expuestas a nuevos olores, rutinas y productos cuando su dueña está embarazada. Y algunos gatos no reaccionan bien a los cambios ambientales, a menudo se estresan o se ponen ansiosos, lo que puede conducir a un comportamiento agresivo. Sigue leyendo para obtener más información sobre por qué los gatos a veces atacan a las personas embarazadas.
Las 5 razones por las que los gatos atacan a las mujeres embarazadas
1. Se sienten abandonados
Los gatos que están apegados a sus compañeros humanos a menudo desarrollan ansiedad cuando no reciben suficiente atención. Está relacionado con las nuevas rutinas del hogar que a veces significan que los gatos no reciben mimos ni tiempo de juego de la manera y en el momento que esperan.
Los gatos son criaturas de hábitos que pueden estresarse fácilmente cuando las cosas no salen como de costumbre, y pueden ser exquisitamente sensibles incluso a cambios menores. Si bien puede parecer que su gato todavía recibe mucho amor y atención, es posible que espere atención en momentos en los que ya no la recibe.
2. Están detectando cambios hormonales
Los gatos tienen un sentido del olfato increíblemente agudo. Pueden olfatear olores sutiles que los humanos no tienen suficientes receptores de olores para captar o interpretar. Lo más probable es que los gatos se den cuenta de los cambios hormonales que acompañan al embarazo, que pueden asociar con cambios ambientales negativos.
Los gatos dependen principalmente del olor para reconocerse entre sí. También usan el olfato para identificar entornos y personas familiares. Debido al embarazo, el antiguo aroma reconfortante de su persona ahora es diferente.
3. Están asustados
El estrés y la ansiedad pueden conducir a la agresión basada en el miedo en los gatos. Las mascotas que están ansiosas por los cambios e inseguras pueden morder y golpear cuando no se sienten cómodas. Si una gata fue regalada por una dueña embarazada antes de llegar a su nuevo hogar, puede tener miedo de perder su hogar y reaccionar con miedo cuando la nueva dueña está embarazada. Otros signos a tener en cuenta que pueden indicar ansiedad felina incluyen f alta de apetito y evitar el contacto visual con la persona embarazada.
4. Tienen problemas de comportamiento
Muchos gatos son perfectamente tranquilos cuando se sienten seguros y contentos, pero tienen problemas de comportamiento subyacentes que pueden manifestarse en condiciones estresantes. Los gatos a menudo detectan y responden a los niveles de estrés de sus seres queridos. Si está preocupado o preocupado, es posible que su gato se dé cuenta y se adapte a sus emociones.
Otros signos de estrés y ansiedad felina incluyen lamerse y esconderse en exceso. Estos problemas a menudo se vuelven manejables una vez que los gatos comienzan a sentirse cómodos una vez más.
5. No están contentos con los cambios ambientales
Los gatos a menudo se estresan por los cambios ambientales, como ser excluidos de las habitaciones a las que antes tenían acceso, lo que puede hacer que se sientan abandonados, excluidos y temerosos de perder el amor de su persona.
Los gatos probablemente ven a la persona embarazada como la fuente de la inseguridad, lo que lleva a momentos de comportamiento basado en el miedo. Aumentar el nivel general de comodidad de su gato puede ayudarlo a sentirse más seguro y en casa, lo que puede conducir a una menor territorialidad.
Las 4 formas de lidiar con la agresión felina
La mejor manera absoluta de prevenir o limitar la agresión felina es tomar algunas medidas preventivas con anticipación para ayudar a su gato a aclimatarse a las nuevas rutinas y asegurarse de que no se sienta excluido por los cambios que ocurren en el entorno. casa. Simplemente ignorar el comportamiento y permitir que tu gato tenga espacio suele ser la mejor manera de reaccionar ante la agresión. A continuación, se incluyen algunos consejos para ayudar a su gato a volver a la normalidad.
1. Tome los cambios a la hora de comer lentamente
El embarazo a menudo resulta en alegría, felicidad, anticipación y cambios en las tareas del hogar. Tome cualquier cambio en la rutina de las comidas de su gato con calma para darle tiempo a adaptarse. Comience por permitir que un miembro de la familia alimente a su gato y cuide la arena de su gato. Si alimenta al gato a la misma hora todos los días y pasa tiempo jugando con él, tu mascota desviará su atención de ti y será menos probable que actúe de forma agresiva.
2. Crear tiempo de vinculación dedicado
El tiempo de vinculación dedicado puede contribuir en gran medida a garantizar que los gatos no se sientan excluidos o abandonados. Si bien a menudo es imposible continuar con tu rutina durante el embarazo, puedes adaptar un nuevo horario para pasar tiempo con tu gata. A los gatos les encantan las rutinas, así que trata de jugar con tu gato y pasar tiempo con él a la misma hora todos los días.
3. Deje que su gato tome la iniciativa
Los gatos a menudo prefieren tomar la iniciativa cuando se trata de la interacción humana. Háblale a tu gato en voz baja y muévete lentamente cuando te acerques. Considere darle un boop (saludo de dedo-nariz-nariz); es una forma dulce y sin presión de hacerle saber a su gato que le gustaría acariciarlo. Sin embargo, si tu gato no está interesado en interactuar, también está bien.
4. Dale a tu gato un espacio apto para felinos
Muchas cosas cambian en los días previos a la llegada de un nuevo bebé. A los gatos a menudo se les restringe el acceso a las áreas futuras de la guardería que alguna vez se les permitió explorar, lo que puede aumentar la sensación de exclusión de su gato. Considere crear un paraíso felino en otra habitación para su gato donde pueda retirarse y relajarse.
Puede agregar perchas verticales, como árboles para gatos y estantes, y tener juguetes y lugares para que su amigo se esconda. Muchos gatos se ponen ansiosos con los bebés que lloran, por lo que tener un lugar para escapar cuando se sienten abrumados puede mantenerlos tranquilos. Modificar tu casa antes de la llegada de tu bebé le da a tu gato mucho tiempo para acostumbrarse a usar su habitación como refugio antes del gran día.
Conclusión
Los gatos a menudo tienen problemas para adaptarse a los cambios, y casi todo lo relacionado con los bebés encaja a la perfección. Cuando los gatos se estresan debido a las nuevas rutinas, a veces se vuelven agresivos, incluso con sus seres queridos. Debido a que las mujeres embarazadas producen hormonas diferentes a las habituales, sus olores alterados no brindan una sensación familiar de comodidad a sus gatos y pueden causar estrés.