Algunos gatos son "gatos falderos" y otros no, de la misma manera que a algunas personas les gustan los abrazos, y otras huirán de ti si te les acercas con los brazos extendidos. Hay varias razones por las que su gato puede ser menos cariñoso que otros, como su personalidad, raza, socialización y edad A continuación, analizaremos los factores que influyen en el temperamento de su gato y exploraremos si Hay maneras de hacer que tu regazo sea un lugar más tentador para acurrucarte y tomar una siesta.
¿Por qué un gato es un gato faldero y otro no?
Desafortunadamente, la respuesta no es simple, lo que significa que no podremos brindarle una solución fácil que convierta a su gato en un gato faldero. Sin embargo, examinaremos las razones más comunes por las que tu gato podría evitar acurrucarse contigo.
Edad
Cuando los gatos son jóvenes, están mucho más interesados en explorar, correr y causar travesuras. Tienen altos niveles de energía y no tienen tiempo para relajarse en tu regazo. A medida que su gato envejece, es posible que busque pasar tiempo con usted porque se siente más vulnerable o tiene un vínculo más fuerte con usted. Algunos gatos tardan más en madurar y calmarse que otros, y si tienes un gato joven al que no le gusta sentarse en tu regazo, es posible que veas que su comportamiento cambia con el tiempo.
Socialización Temprana
La historia, la socialización y las experiencias de un gato con humanos en el pasado son importantes para desarrollar su personalidad. Si tu gato es un rescate, es posible que no estés seguro de su historial; los gatos que han sido manipulados mucho pueden actuar de manera diferente a los gatos sin mucha experiencia con un toque humano amable.
La socialización es más exitosa cuando un gatito tiene de 2 a 7 semanas de edad porque está ansioso por aprender y abierto a nuevas experiencias.1También es importante tener en cuenta que existe una gran diferencia entre la socialización y la exposición. No es lo mismo exponer a tu gatito a un niño pequeño al que le gusta gritarle al oído y jalarle la cola, que presentarlo a varios niños tranquilos que actúan apropiadamente alrededor del gatito. El primero podría dar lugar a un gato al que no le gustan los niños, mientras que el segundo da como resultado un gato al que le encantan los niños.
Del mismo modo, un gato que no ha interactuado con un humano probablemente se sienta asustado a su alrededor, y las experiencias traumáticas pueden hacer que un gato se sienta desconfiado y cauteloso. Por supuesto, eso no significa que todos los gatitos que se socializan temprano se conviertan en gatos falderos.
Personalidad y Raza
Algunas razas, como el abisinio, el persa y el escocés, se consideran más amistosas y cariñosas que otras. Sin embargo, algunos gatos nunca serán gatos falderos porque eso es parte de su personalidad, y está bien. El hecho de que tu gato no se acurruque en tu regazo no significa que no te ame, pero probablemente te lo demuestre de diferentes maneras.
¿Tu gato alguna vez se convertirá en un gato faldero?
Es importante entender a nuestros gatos y respetar sus límites. Los gatos te harán saber lo que les gusta, lo que toleran y lo que detestan por completo. Solo tienes que estar atento a las señales.
Las 5 formas de animar a tu gato a sentarse en tu regazo
1. No lo fuerces
Deje que su gato se acerque a usted y haga que su regazo sea más acogedor cubriendo sus piernas con una manta suave. Nunca obligue a su gato a sentarse en su regazo ni lo sostenga allí porque solo destruirá la confianza de su gato y podría hacer que le tenga miedo. Esto está destinado a ser algo agradable, y forzarlo lo convierte en una interacción desagradable.
2. Crear un espacio seguro
Hay más que tu gato confiando en ti; también deben confiar en el espacio. Si es caótico y estresante, no se van a relajar. Entonces, tu primer paso podría ser hacer que tu gato se sienta más cómodo en su entorno.
Puedes conseguir un árbol para gatos para la habitación, comprar juguetes nuevos y crear algunos escondites cerca para que se sientan seguros. Los gatos se sienten más relajados sabiendo que pueden escapar fácilmente a otra habitación si su casa se vuelve demasiado ruidosa.
3. Refuerzo positivo
Puedes usar su golosina favorita, primero dejándola a tus pies y luego, cuando responda, poniendo otra un poco más cerca de ti hasta que haya una en tu regazo. A medida que se acerque, evita acercarte y tocarlo porque quieres asegurarte de que siga confiando en ti.
4. Mantenga las interacciones de vuelta positivas
Quieres que tu gato asocie tu regazo con un lugar tranquilo y seguro para dormir. Por lo tanto, evita ponerlos en tu regazo cuando sea el momento de cortarles las uñas.
5. Pasar tiempo de calidad juntos
Jugar con tu gato y pasar tiempo de calidad juntos fortalece su vínculo. Si tu gato asocia acercarse a ti con experiencias positivas, es más probable que te busque con más frecuencia.
Otras formas de demostrarle a tu gato que lo amas
Algunos gatos nunca serán gatos falderos, pero eso no significa que te quieran menos o que tú los quieras menos. A veces se trata de descubrir el lenguaje de amor de tu gato y hacerle saber cuánto significa para ti. Ejemplos de formas de demostrarle a tu gato que lo amas son:
- Consígales una caja de cartón para jugar
- Parpadeo lento hacia ellos
- Únete a la hora de jugar
- Pase tiempo a solas con ellos (especialmente importante en un hogar con varias mascotas o en un hogar con niños)
- Haz una sesión de arreglo personal
- Regálales un nuevo juguete, ropa de cama, una manta cómoda o un árbol para gatos
Reflexiones finales
Hay varias razones por las que algunos gatos son gatos falderos y otros no. A veces se trata de interacciones previas con humanos o f alta de interacciones. O podría deberse a que tu gato aún es joven y tiene cosas mucho más importantes que hacer que acurrucarse en tu regazo para que lo abracen.
Además, el hecho de que tu gato no sea un gato faldero ahora no significa que no se convertirá en uno. Hay maneras de tentar a tu gato para que se siente en tu regazo, pero la clave es ser paciente y seguir el ritmo de tu gato. Si tienes un gato que es reacio a convertirte en su cojín para la siesta, ¡hay muchas otras maneras de demostrarle cuánto lo amas y lo aprecias!