La mayoría de las personas están familiarizadas con la demencia en humanos, pero ¿sabías que también puede afectar a tu perro? El Deterioro Cognitivo Canino (CCD), o Síndrome de Disfunción Cognitiva (CDS), es el término veterinario para la demencia canina, y presenta síntomas y signos similares a los de los humanos.
A medida que nuestros compañeros caninos viven vidas más largas, vemos más signos de demencia canina. Los estudios indican que hasta el 62 por ciento de los perros entre las edades de 11 y 16 años muestran signos de demencia.
Obtenga más información sobre la demencia canina, los signos y síntomas a tener en cuenta y cuándo buscar atención veterinaria.
Signos y síntomas clínicos de demencia en perros
Los veterinarios usan los siguientes síntomas para diagnosticar CCD después de descartar otras causas médicas.
Algunos otros indicadores de demencia pueden incluir dificultad para comer o beber y movimientos repetitivos o inquietos. Los perros con demencia pueden tener dificultades para encontrar comida o el tazón de agua. También pueden dejar caer la comida mientras la comen o tener dificultades para encontrar golosinas cuando se las ofrecen.
Los movimientos inquietos o repetitivos tienen menos probabilidades de confundirse con afecciones subyacentes. Los perros con demencia pueden caminar o mostrar comportamientos inquietos, como mover la cabeza, caminar en círculos o sacudir las piernas, que es un resultado directo de la degeneración del cerebro.
Otras condiciones de salud pueden causar síntomas similares, como:
- Diabetes
- Presión arterial alta
- Enfermedad de Cushing
- Pérdida de visión o audición
- Infección del tracto urinario
- Problemas renales
- Artritis
- Trastornos de la piel
Si bien la CCD no tiene etapas reconocidas como la demencia en humanos, es una condición progresiva. La intervención veterinaria temprana puede ayudarlo a apoyar a su perro y tratar los efectos secundarios y los síntomas, como la ansiedad, la f alta de sueño y el malestar físico.
Consejos para ayudar a un perro con demencia
No hay cura para la demencia, pero puedes mejorar la calidad de vida de tu perro y hacer que se sienta lo más cómodo posible durante los años que le quedan. Estos son algunos consejos para ayudar a tu perro con demencia.
Conclusión
La demencia canina puede ser un desafío. Los síntomas pueden cambiar con el tiempo y pueden surgir otras condiciones, pero existen numerosas formas de mejorar la calidad de vida de su perro y hacer que sus "años dorados" sean lo más agradables posible. Asegúrese de trabajar en estrecha colaboración con su veterinario para tratar los síntomas de su perro y mostrarle paciencia, amabilidad y mucho amor.