Moquillo es un término para un virus que puede causar enfermedades graves en los perros. Algunas formas de moquillo también pueden infectar especies de vida silvestre, como zorros, visones y mapaches.
Los signos del moquillo pueden incluir convulsiones, diarrea y una variedad de otros problemas. Inicialmente, las infecciones tienden a comenzar con problemas en el tracto gastrointestinal. Después de eso, pueden presentarse problemas posteriores en el sistema neurológico.
El moquillo afecta más comúnmente a los perros que no han recibido su serie completa de vacunas, lo que a menudo significa cachorros, aunque los perros adultos o perros mayores con un historial de vacunación deficiente también pueden estar en riesgo. La prevención es principalmente a través de la vacunación y el tratamiento es de apoyo, aunque muchos perros que contraen la enfermedad sucumbirán a la enfermedad, a pesar del cuidado.
En muchos países, debido a las principales campañas de vacunación, el moquillo canino se ha vuelto mucho menos común. Sin embargo, todavía se ve, y siempre es motivo de preocupación cuando se encuentra. Los pacientes que sobreviven a la enfermedad pueden tener problemas neurológicos de por vida, a pesar de recuperarse de la infección inicial.
¡Siga leyendo para descubrir formas de tratar el moquillo!
Síntomas del moquillo canino
Tos, fiebre, letargo, diarrea, vómitos, inapetencia o anorexia son posibles signos de la enfermedad, pero no se limitan al moquillo. Si observa alguno de estos signos y tiene inquietudes, comuníquese con su veterinario de inmediato.
Como se mencionó anteriormente, en las últimas etapas de la infección, se pueden observar signos neurológicos, que incluyen inclinación de la cabeza, dificultad para caminar y convulsiones.
Enfermedades similares al moquillo canino
Los problemas gastrointestinales, como malestar estomacal o cuerpos extraños, pueden parecerse al moquillo canino. Nuevamente, si tiene inquietudes sobre su perro, no dude en comunicarse con su veterinario tan pronto como note algún problema. ¡Siempre es mejor prevenir que lamentar!
Prevención
Dado que la vacunación contra el moquillo es una parte central de la serie de vacunas de los perros, los perros generalmente deben vacunarse contra esta enfermedad. Por tanto, los que corren más riesgo son los perros que no han sido vacunados.
Los perros adultos no vacunados o los cachorros que no están completamente vacunados deben evitar otros lugares donde puedan estar perros no vacunados (p. ej., parques infantiles, parques para perros, etc.) para evitar el contacto con el virus.
Tratamiento
El tratamiento generalmente es de apoyo, lo que significa que no hay un tratamiento específico. Más bien, se tratan signos clínicos específicos en su mascota. Por ejemplo, si su perro está deshidratado, su veterinario podría administrarle líquidos a través de un catéter intravenoso.
Muchos perros requerirán hospitalización por su moquillo, ya que requiere altos niveles de atención de enfermería, observación intensa, así como controles de laboratorio frecuentes para corregir los desequilibrios de electrolitos y glóbulos blancos que puede causar el virus.
Otros-Tratamientos-Pueden-Incluir:
- Nutrición IV o terapia de electrolitos
- Antibióticos
- Alivio del dolor
- Medicamentos contra las náuseas
Y recuerda: ¡nunca le des a tu perro o gato medicamentos para humanos, ya que pueden ser venenosos para las mascotas!
En Conclusión
¡Las palabras "moquillo canino" son palabras que ningún dueño de perro quiere encontrar! La mejor oportunidad que puede darle a su perro para que no lo haga es informar rápidamente a su veterinario sobre cualquier cosa que no parezca correcta, para que la intervención pueda iniciarse lo antes posible.