¿Tu perro siempre corre al sonido de un plato de comida traqueteando o comida humana cocinándose en la estufa? Si bien este es un comportamiento normal para la mayoría de los perros, es posible que se alarme si su perro nunca parece llenarse, especialmente si está llorando o siguiéndolo por la casa pidiendo más. Aquí le mostramos cómo saber si su cachorro puede estar obsesionado con la comida o si está tratando de decirle que necesita atención médica.
Cuando el hambre excesiva puede ser una señal de que algo anda mal
Ciertas enfermedades como la diabetes, el hipertiroidismo, la enfermedad de Cushing y los trastornos pancreáticos pueden cambiar la forma en que su perro metaboliza los alimentos, lo que podría llevarlo a pedir más. Si notas que tu mascota de repente pide más comida de lo normal, siempre es una buena idea hacer una cita con tu veterinario para asegurarte de que todo está bien.
Factores a tener en cuenta al preguntarse si el comportamiento de su perro es normal
Aunque la mendicidad es un comportamiento relativamente común (especialmente si cedes con frecuencia a sus demandas), es posible que desees considerar estos factores para determinar si tu mascota podría estar diciéndote algo más:
- Su historia/antecedentes:¿Crecieron en un hogar amoroso y estable donde sabían que la hora de comer nunca estaba lejos? Los perros que han vivido en varias casas o que han tenido que pasar apuros en las calles pueden desarrollar una mentalidad de pobreza porque en el pasado no tenían un suministro constante de alimentos. Las mascotas rescatadas pueden comer para no pasar hambre y se volverán obesas si se entrega a esta tendencia. Trate de vincularse con su mascota a través de juguetes o tiempo de calidad para dejar de pensar en sus preocupaciones sobre la comida. Cuanto más confíen en ti, menos acudirán a su plato de comida en busca de consuelo.
- Edad: Puede parecer que tu cachorro en crecimiento siempre está comiendo, pero en esta etapa de la vida necesita más calorías que nunca. Es normal que un perro joven de menos de 2 años pida más comida de la que normalmente pediría. Si su perro mayor de repente no puede dejar de pensar en la comida, es más probable que sea un problema médico que no debe ignorar.
- Interés en su comida: Si desprecian las croquetas pero se apresuran a reclamar los huevos de la sartén, es posible que solo te estén pidiendo tu comida. En este caso, en realidad no se mueren de hambre, solo son quisquillosos.
- Ganancia/pérdida de peso: ¿Ha ganado o perdido mucho peso su mascota desde que comenzó a notar que aumentaba su apetito? Cuantas más calorías ingiera tu perro, más alto debería subir su peso. Definitivamente es una preocupación mayor si tu perro baja de peso a pesar de comer más de lo habitual. Por supuesto, tampoco quieres que tu perro se vuelva obeso porque eso abre la puerta a varios problemas de salud.
- Nivel de actividad: ¿Su mascota se ha unido a usted en su nuevo horario de caminata o participa con frecuencia en un juego de buscar? Su perro podría necesitar las calorías adicionales para apoyar su estilo de vida activo. Sin embargo, si tu perro simplemente está desplomado en el sofá, es posible que no necesite tanta comida.
- Personalidad: Al igual que las personas, algunos perros siempre parecen tener hambre. Tal vez tu perro sea un amante de la comida en miniatura al que realmente le guste probar tu plato.
Conclusión
Siempre debe visitar a su veterinario si nota un patrón de comportamiento nuevo y repentino, especialmente si va acompañado de efectos secundarios indeseables, como aumento o pérdida de peso excesivos. Si bien es normal que los perros pidan comida, no es normal que su perro pierda peso a pesar de comer una cantidad generosa o de estar demasiado obsesionado con la comida. Si el problema persiste, habla con tu veterinario para descartar enfermedades médicas graves como la diabetes.