Si buscas un perro guardián,sí, el Akita es una gran opción La raza es conocida por ser valiente y excepcionalmente leal, dos cualidades clave de cualquier excelente perro guardián. Mientras que el Akita será desconfiado y reservado con los extraños, su familia sacará a relucir su lado suave. Para obtener más información sobre Akitas, sigue leyendo a continuación.
Historia de la Raza Akita
El Akita se desarrolló en Japón a principios del siglo XVII. Más específicamente, se desarrolló en la prefectura de Akita en el norte de Japón, lo que le dio a la raza su nombre. Según historias antiguas, el emperador en ese momento desterró a un noble a la prefectura de Akita. El noble estaba particularmente interesado en los perros y aprovechó al máximo su situación. Durante su destierro, animó a los barones bajo su autoridad a competir en la cría de perros de caza, centrándose en perros enormes y versátiles.
Generaciones de crianza deliberada crearon un cazador experto, un gran trabajador y un compañero leal. El Akita era tan poderoso que podía cazar ciervos, jabalíes e incluso el colosal oso Yezo.
La propiedad de Akitas alguna vez estuvo restringida a la familia imperial y algunos miembros selectos de la corte, y han sido el foco de muchas leyendas japonesas. Si bien la raza se ha acercado peligrosamente a la extinción en ocasiones, la supervivencia del perro quedó asegurada con la fundación del club nacional japonés de razas en 1927. Hoy en día, los perros Akita son utilizados como perros guardianes y compañeros por familias de todo el mundo.
¿Cómo son los perros Akita?
El Akita tiene un carácter noble y una figura imponente. Este musculoso perro tipo Spitz es famoso por su dignidad y naturaleza protectora. Miden de 24 a 28 pulgadas en el hombro y pesan hasta 100 libras para una mujer y 130 libras para un hombre. Este enorme perro se toma muy en serio su papel de guardián.
El Akita tiene una personalidad tranquila. Es desconfiado con los extraños e intolerante con otros animales. Por eso, no se recomienda llevar un Akita a una casa con varias mascotas. Si bien Akitas puede socializarse para tolerar a otros animales, es poco probable que forjen un vínculo. Además, el Akita se cría para tener un fuerte instinto de presa. Los animales más pequeños pueden desencadenar esta respuesta y provocar un desastre.
Sin embargo, los Akitas prosperan en la interacción humana y tienen mucho amor para dar a sus familias. En familia, el Akita mostrará su lado juguetón y cariñoso. Se comportan mejor con los niños pequeños que con otras mascotas, aunque aún se recomienda que cualquier interacción con los niños sea supervisada debido al tamaño del Akita. Incluso el Akita con las mejores intenciones puede derribar accidentalmente a un niño pequeño simplemente por su tamaño.
Los Akitas están prácticamente programados para proteger a sus seres queridos. Con un Akita como compañero, siempre tendrás a alguien cuidando de ti.
La importancia de entrenar y socializar a los perros Akita
Los Akitas protegen a sus dueños y son infinitamente leales, pero esta devoción no se extiende a otros fuera de la familia. Con respecto a los forasteros, el Akita será cauteloso en el mejor de los casos y hostil en el peor. Para evitar agresiones innecesarias, el Akita debe ser socializado y entrenado desde el nacimiento.
El Akita debe aprender que no todos los extraños son amenazas y cómo comportarse en situaciones desconocidas. Dado que el perro es tan grande y poderoso, un Akita mal entrenado puede causar serios problemas, como dañar a alguien o a otro animal.
Son inteligentes pero independientes, lo que puede dificultar el entrenamiento. Dado que entrenar adecuadamente a un Akita es vital, no se recomienda para dueños de perros primerizos.
Socialización de cachorros Akita
Socializar a tu Akita mientras aún es un cachorro es esencial. El momento ideal para el entrenamiento comienza alrededor de las 3 semanas y luego se cierra alrededor de las 16 o 20 semanas de edad. Durante este tiempo, debe exponer a su cachorro Akita a nuevos sonidos, vistas, olores y otras sensaciones para que su perro no les tema más adelante en la vida. Algunas áreas clave en las que concentrarse al socializar a su Akita incluyen:
- Introducciones: lleva a tu cachorro a conocer a varias personas nuevas cada día, incluidos niños que se portan bien.
- Manejo: Asegúrate de que varias personas carguen y abracen a tu cachorro Akita, y asegúrate de que el contacto sea agradable.
- Zonas de alimentación: cuando tu cachorro esté comiendo, acércate al comedero y deja caer una delicia en su plato. Esto ayudará a disipar los sentimientos negativos de tu perro sobre las personas que se acercan a su comida y agua.
- Ruidos: Preséntale a tu Akita diferentes sonidos, pero asegúrate de no exponerlo demasiado rápido. Esto puede abrumar a tu cachorro.
- Comportamientos agresivos: no respondas con castigos severos cuando tu cachorro muestre comportamientos agresivos. Esto a menudo resulta contraproducente. En su lugar, premia el comportamiento correcto.
- Soledad: Tu cachorro necesitará aprender a estar solo para evitar desarrollar ansiedad por separación.
Datos importantes sobre el Akita
Más allá de las habilidades del Akita como perro guardián y su necesidad de un entrenamiento temprano y eficaz, hay más cosas que querrá saber antes de traer un Akita a casa.
1. Akitas son perros limpios
Un gran beneficio de tener un Akita es lo limpia que es la raza. Un Akita a menudo se acicalará como un gato y mantendrá su pelaje limpio. Además, el entrenamiento doméstico de un Akita suele ser más fácil que el entrenamiento doméstico de otras razas. Se mudan moderadamente y solo necesitan cepillarse dos veces por semana. Sin embargo, los Akitas se quitan la capa interna dos veces al año, por lo que deberás cepillar a tu perro con más frecuencia en esta época.
2. Akitas prospera con dueños de perros experimentados
Debido a los altos niveles de entrenamiento efectivo que necesita el Akita, el perro no se recomienda para dueños primerizos. Si bien este perro es inteligente y cariñoso, también tiene una voluntad fuerte e independiente, lo que puede dificultar que un dueño de perro sin experiencia lo entrene adecuadamente.
Akitas responde bien a las órdenes respetuosas y confiadas. Prosperan bajo el refuerzo positivo y la motivación en lugar del castigo y la fuerza. Si confía en sus habilidades de entrenamiento de perros, el Akita puede ser su compañero perfecto.
3. El clima frío aumenta el impulso del perro Akita
Algo sobre el clima frío parece hacer latir la sangre de Akita. Si vives en un área nevada, es posible que notes que tu Akita rueda por la nieve o incluso se la come. También estarán ansiosos por cazar conejos u otras criaturas pequeñas, así que asegúrese de tener a su perro en un área cerrada y supervisada cuando esté al aire libre.
Reflexiones finales
Los Akitas son perros extraordinarios y majestuosos. Su le altad y dedicación a sus familias son inquebrantables, y su valentía es inquebrantable frente al peligro. Si lo que quieres es un perro guardián, el Akita puede desempeñar ese papel con excelencia. Necesitará un régimen estricto de entrenamiento y socialización para asegurarse de que su Akita pueda distinguir a un amigo de un enemigo, y se recomiendan dueños de perros experimentados. Si decide que el Akita es adecuado para usted, seguramente será un fiel compañero de por vida.