Un gato dormido es la viva imagen de la serenidad. ¡A menos, por supuesto, que esta imagen pacífica sea interrumpida por los ronquidos de tu gato! Si bien ciertamente puede ser lindo, es posible que te preguntes si es normal que tu gato ronque.
Ronquido describe un ruido grave producido en las vías respiratorias superiores durante el sueño. Cualquier cosa que bloquee el flujo de aire en el tracto respiratorio superior puede hacer que un gato produzca estos sonidos. Los ronquidos pueden ser perfectamente normales para algunos gatos, pero también pueden ser una señal de que algo anda mal.
Quizás te estés preguntando por qué mi gato ronca. Exploremos las razones más comunes por las que un gato ronca.
Las 6 razones comunes por las que los gatos roncan
1. Infecciones del tracto respiratorio superior
Los ronquidos pueden ser un signo de una infección del tracto respiratorio superior. Estas infecciones causan congestión nasal, lo que puede provocar respiración ruidosa y ronquidos. Las infecciones del tracto respiratorio superior son comunes en los gatos y pueden ser causadas por bacterias, virus y hongos. Los agentes infecciosos más comunes implicados en las infecciones del tracto respiratorio superior son el virus del herpes felino, el calicivirus felino, Chlamydia felis y Cryptococcus neoformans.
Una infección del tracto respiratorio superior también puede causar una secreción clara o coloreada de la nariz o los ojos. Otros signos comunes incluyen estornudos, conjuntivitis, úlceras bucales, fiebre, f alta de apetito y poca energía.
2. Cuerpos extraños
Los cuerpos extraños, como briznas de hierba o semillas de hierba, pueden alojarse en la nariz de un gato después de ser inhalados o vomitados después de la ingestión. Esto puede causar una obstrucción del flujo de aire y los ronquidos posteriores. Los signos comunes de cuerpos extraños nasales son estornudos, manoseos en la cara, resoplido, arcadas, intentos repetidos de tragar y secreción nasal de una sola fosa nasal.
3. Pólipos y otros crecimientos
Los pólipos inflamatorios son crecimientos benignos que ocurren con mayor frecuencia en gatos jóvenes menores de 2 años. Estos pólipos pueden crecer dentro de la cavidad nasal y obstruir la respiración. Esto puede provocar ronquidos junto con otros signos de las vías respiratorias superiores, como secreción nasal, estornudos y dificultad para respirar. Los gatos con pólipos nasales también pueden tocarse las orejas y la cara y sacudir la cabeza.
La neoplasia o cáncer nasal es más común en gatos mayores. Estos crecimientos pueden dañar los tejidos circundantes y obstruir el flujo de aire, lo que provoca una respiración ruidosa y ronquidos. Los gatos afectados también pueden tener secreción nasal y mostrar f alta de apetito y poca energía. Algunos gatos desarrollarán deformidades faciales, como una protuberancia sobre el puente de la nariz, a medida que el tumor crece en tamaño. Los signos suelen estar presentes durante semanas o meses. El tumor nasal más común en gatos es el linfoma, seguido del adenocarcinoma y el carcinoma de células escamosas.
4. Razas braquicefálicas
Los ronquidos son comunes en razas braquicefálicas o de cara chata, como el persa, el exótico de pelo corto y el himalayo. "Brachy" significa acortado y "cefálico" significa cabeza, por lo que la palabra braquicéfalo significa literalmente "cabeza acortada". Los cráneos de estos gatos tienen una longitud más corta en comparación con los gatos normales. Esto le da a la cara y la nariz una apariencia aplanada y altera las estructuras de los tejidos blandos circundantes. Su anatomía alterada hace que estas razas sean más propensas a roncar. Si bien sus caras planas son lindas, algunos gatos braquicefálicos sufren una afección llamada síndrome de las vías respiratorias braquicefálicas. Los gatos afectados tienen aberturas de la nariz anormalmente estrechas, fosas nasales estrechas y un paladar blando alargado, todo lo cual resulta en dificultades para respirar. Los gatos gravemente afectados por este síndrome pueden necesitar cirugía para ayudarlos con su respiración.
5. Obesidad
Los gatos con sobrepeso pueden roncar debido a los depósitos de grasa en los tejidos que rodean las vías respiratorias superiores. La presión de estos depósitos de grasa puede obstruir parcialmente las vías respiratorias y causar ronquidos.
Los efectos secundarios negativos del exceso de peso en el sistema respiratorio de un gato pueden extenderse más allá de los ronquidos. El exceso de grasa también puede hacer que sea más difícil inflar los pulmones, lo que ejerce una presión adicional sobre el sistema respiratorio. Esto es especialmente peligroso durante la anestesia.
De hecho, hay un nombre especial para describir este fenómeno: síndrome de Pickwickian o síndrome de hipoventilación por obesidad. Lleva el nombre del personaje "Joe" en la novela de Charles Dickens de 1837 "Los papeles póstumos del Club Pickwick". Este personaje obeso roncaba y se dormía repetidamente durante el día.
La obesidad también aumenta los riesgos de diabetes mellitus, enfermedad del tracto urinario inferior felino y problemas de movilidad y articulaciones. Estudios a largo plazo han demostrado que la obesidad reduce la esperanza de vida.
6. Posición para dormir
Los gatos son maestros en acurrucarse en espacios reducidos. Esto puede hacer que un gato se duerma en una posición incómoda y puede provocar ronquidos si la posición de la cabeza obstruye parcialmente el flujo de aire. Una vez que un gato cambia de posición, los ronquidos deberían dejar de roncar.
¿Es normal que mi gato ronque?
Para responder a la pregunta, ¿por qué ronca mi gato? Los ronquidos pueden ser normales en algunos gatos y podrían ser solo una peculiaridad de tu gato. Si su gato parece saludable, no tiene sobrepeso y no tiene otros signos de enfermedad respiratoria, probablemente no tenga que preocuparse por los ronquidos. Sin embargo, menciónelo a su veterinario durante el examen de bienestar anual o bianual de su gato.
Si su gato normalmente silencioso comienza a roncar o si los ronquidos se acompañan de otros síntomas como estornudos, secreción nasal, cambios en el comportamiento o disminución del apetito o los niveles de energía, debe comunicarse con su veterinario, ya que puede indicar que tu gato está enfermo.