Si su perro está lidiando con enzimas hepáticas elevadas, puede que usted y su veterinario intenten averiguar qué está pasando. ¿Proviene de la comida para perros, de una condición médica o de algo más en su entorno?
Si su perro tiene enzimas hepáticas elevadas que se muestran en un perfil de química sanguínea, su veterinario trabajará con usted para diagnosticar y, cuando sea posible, tratar la afección. Las causas de las enzimas hepáticas elevadas son numerosas y no siempre se correlacionan con el funcionamiento del hígado, por lo que es probable que se necesiten más pruebas.
¿Puede la comida para perros causar enzimas hepáticas elevadas?
Sí, es posible que las enzimas hepáticas elevadas se deban a los alimentos, pero no es común.
En ocasiones, los alimentos para perros pueden contaminarse con una toxina de moho llamada aflatoxina. Una vez que esto se descubra, se retirará la comida. Las aflatoxinas pueden causar daño hepático y lamentablemente han resultado en múltiples muertes de perros. Es por eso que es extremadamente importante mantenerse al día con los retiros actuales de alimentos para perros. Si el lote que está alimentando a su cachorro está contaminado, debe dejar de alimentarlo lo antes posible.
Si su perro tiene un problema hepático subyacente, los alimentos con alto contenido de cobre pueden empeorarlo. Razas como el Bedlington Terrier están predispuestas a este tipo de problemas hepáticos.
¿Puede la comida de un perro causar problemas hepáticos?
No es común que la comida de un perro cause problemas hepáticos, pero la comida se usa comúnmente para ayudar a disminuir los efectos de la enfermedad hepática.
Comer en exceso y volverse obeso también puede provocar el almacenamiento de grasa en el hígado. Si los perros dejan de comer repentinamente debido a una enfermedad, estos perros son más propensos a la enfermedad del hígado graso, que es muy grave.
Algunos alimentos para humanos pueden causar problemas hepáticos en los perros debido a su toxicidad, estos incluyen chicles, dulces, pasta de dientes o cualquier cosa que contenga xilitol. El xilitol es altamente tóxico para los perros.
Síntomas de enzimas hepáticas elevadas en perros
Si no sabe qué buscar, es posible que su cachorro tenga problemas hepáticos y usted ni siquiera se enterará. Según Pet WebMD, estos son los síntomas más comunes asociados con enzimas hepáticas elevadas en perros.
- Pérdida de apetito
- Aumento de la sed
- Pérdida de peso
- Confusión
- Vómitos o diarrea
- Aumento de la micción
- Ictericia
- Debilidad
- Sangre en orina o materia fecal
- Convulsiones
- Acumulación de líquido en el vientre (ascitis)
- Paso inestable
Si su mascota experimenta alguno de los síntomas de esta lista, le recomendamos que la lleve a un veterinario para obtener un diagnóstico y un plan de tratamiento adecuados.
¿Cómo puede reducir las enzimas hepáticas de su perro?
Esta es una pregunta que su veterinario le ayudará a responder, ya que depende de la causa de los cambios. Los tratamientos más comunes incluyen cambios en la dieta, suplementos, antibióticos y, en los casos más graves, cirugía.
¿Qué alimentos deben evitar los perros con enfermedad hepática?
Si su perro tiene una enfermedad hepática, es muy probable que su veterinario ya le haya recomendado comida para perros. Sin embargo, si no puede pagar un alimento recetado, es posible que le aconsejen que evite los alimentos con alto contenido de cobre o con niveles más bajos de proteína.
Los alimentos para perros que tienen carnes más oscuras o salmón tienen más probabilidades de tener concentraciones más altas de cobre o purinas que pueden necesitar ser restringidas en algunas afecciones hepáticas. Es posible que recomienden ir con una opción de proteína como pollo o pavo.
Si su mascota tiene una enfermedad hepática, obtenga una recomendación de comida para perros de un veterinario que se ajuste a su presupuesto y a los gustos de su perro.
¿Cuánto tardan las enzimas hepáticas en normalizarse en los perros?
El hígado tiene una buena capacidad de regeneración pero realmente depende de la causa de las enzimas hepáticas elevadas. Si ha habido un problema temporal, como la ingestión de xilitol, pueden pasar un par de semanas hasta que todo vuelva a la normalidad. Si hay un problema médico continuo, como el síndrome de Cushing o un tumor hepático, las enzimas pueden permanecer elevadas.
Reflexiones finales
Si sospecha que su perro tiene una enfermedad hepática, llévelo a un veterinario para un chequeo completo y un diagnóstico. Pueden realizar pruebas para informarle qué está pasando y ayudarlo a controlarlo si es posible.
El problema podría provenir de su comida, pero esto no es algo común. Si sospecha que ese es el caso de su perro, debe cambiar su comida lo antes posible para intentar que todo vuelva a estar bajo control. Además, si descubre que la comida de su perro tiene un problema, comuníquese con la FDA para informarlo.